Muy a menudo me encuentro con emprendedores digitales a los que les cuesta mucho delegar. Estas son algunas de las frases típicas que escucho:

“Laura, no me puedo arriesgar a poner en manos de otra persona esta tarea porque si sale mal, voy a perder la confianza del cliente”

“No delego porque voy a tener que dedicar mil horas en explicar cómo hacerlo. Mejor lo hago yo directamente y me ahorro tiempo”

“No quiero que la calidad del trabajo se vea comprometida, por eso no me atrevo a dejarlo en manos de otra persona”

Si te suena alguna de estas situaciones, tal vez estás cayendo en una de las trampas del ego. En este video te cuento cuál es la creencia limitante que puede estar impidiéndote delegar y cómo puedes eliminarla. Además, te comparto qué tipo de tareas puedes empezar a delegar desde hoy mismo.

¡Dale al play!

¡Espero que pongas en práctica estos consejos!

¿Te sientes identificada? Déjame un comentario y cuéntame por qué no estás delegando todavía.


ACCEDE A LA MASTERCLASS GRATUITA